Con spray de pinturas en la mano, el artista Alexis Villanueva Puente, conocido como “El Salsa”, dio los últimos trazos a un paisaje del balneario de Lurín, pintado en uno de los murales temáticos más grandes del país hecho en LurinLive -espacio cultural y de espectáculos- y que muestra escenarios de la cultura del distrito ubicado al sur de Lima.
En estas pinceladas finales de la obra de 235 metros de largo, que le tomó más de cuatro meses hacerla realidad, participaron escolares de los colegios José Faustino Sánchez Carrión y Julio C. Tello Rojas, de la jurisdicción, a quienes les brindó un consejo que aprendió como autodidacta en su camino en el arte de pintar murales y retratos, iniciado en los años 90.
“No tengan miedo del error porque en el arte a veces el error se convierte en una técnica”, les dijo “El Salsa”, reconocido por retratar a cantantes famosos, sobre todo salseros, como Héctor Lavoe, Tito Puente, Celia Cruz y otros, en las paredes de los peligrosos barrios del Callao en los que creció, como Puerto Nuevo y Atahualpa, y donde impulsó un cambio.

Su vínculo con el arte creció en el colegio
Al conectar con los estudiantes, Alexis recordó que fue en la escuela donde hizo su primer retrato, cuando cursaba el segundo grado de primaria. Dibujó, siguiendo las referencias que le dio su mamá, a Miguel Grau para una tarea vinculada al Combate de Angamos.
En las aulas también creció su interés por el arte debido a que su profesora de Historia Universal no les dejaba pegar láminas en los cuadernos. “Era una obligación dibujar y pintar, (eso) nos trajo a mí y a mis compañeros ese compromiso de pintar y una especie de competencia entre nosotros”, contó a OJO.
La regla de su maestra hizo que, a través de su tarea, él se enamore de esta práctica, que con el paso de los años fue evolucionando y lo llevó al muralismo, a lo que se dedica desde los años 90 y que le ha permitido mostrar su talento en lugares como Puerto Rico y Miami y New York, en Estados Unidos.

El arte como cambio
“El primer mural que significó bastante para mí fue el de Héctor Lavoe (que hice) en el año 1996 en Puerto Nuevo. Trascendió en el tiempo porque con los murales que hice allí y en Atahualpa se transformaron esas zonas, de ser peligrosas a ser una de las más reconocidas del Callao”, comentó.
Para “El Salsa”, “el arte es una herramienta de integración y transformación”, que permite encontrar otras formas de ver la vida, como ocurrió con él, quien vivió en un entorno de alta violencia, pero salió adelante. Además, apostó, por ese camino para crear conciencia con proyectos como “Lápidas en la calle”, en el que retrataba a víctimas de la violencia en el Callao; y RespetArte, que buscó alejar a los jóvenes de las calles y la delincuencia.

“Yo, un joven que viene de un barrio que es uno de los más peligrosos del Callao, he vivido en carne propia esa transformación. Creo que tengo una voz autorizada para decir que el arte sí transforma, porque me transformó a mí”, anotó.
OJO AL DATO. “El mural explora la grandeza de Lurín. El arte es una esperanza para las nuevas generaciones”, dijo Marco García, de LurinLive.
CIFRAS
2007 PINTÓ A Tego Calderón, primer artista al que retrató en agradecimiento por ir al Callao.
2016 PARTICIPÓ en el Art Basel, una de las ferias más importantes de arte en el mundo y retrató a salseros.
2020 HIZO
retratos de personas fallecidas con cáncer para crear conciencia sobre este mal.