La vida en muchos casos vale un celular. En lo que va del 2023, se investiga un total de 456 muertes vinculados al robo de celulares en el país, según el Sistema de Denuncias Policiales. Lima, Lambayeque, Piura, Ica y Chiclayo, concentran la mayoría de estos decesos.
Uno de los últimos casos ocurrió en septiembre último cuando la madre de familia Isabel Minaya denunció, entre lágrimas, que su hijo de tan solo 18 años fue asesinado por criminales en una avenida de Surquillo. El joven salía del trabajo y regresaba a su hogar en el sector de Casa Huertas. Una cámara de seguridad de la zona registró los momentos previos a su fallecimiento.
Las imágenes muestran a dos robustos hombres corriendo detrás de su víctima para quitarle el celular, luego lo apuñalan con un objeto punzocortante y lo abandonan malherido.
AL DETALLE
Según los datos del Registro Nacional de Equipos Terminales Móviles para la Seguridad (Renteseg), correspondientes al primer semestre de 2023, analizados por el Organismo Supervisor de Inversión Privada en Telecomunicaciones (Osiptel), a las 10 de la mañana se realiza el mayor número de reportes por robo: 366 equipos móviles en promedio.
Asimismo, hay más cantidad de registros de teléfonos robados por hora los días lunes (249 en promedio), seguido del martes (215) y del sábado (213).
Del total de celulares sustraídos por el hampa, 292,530 fueron de la marca Samsung, le sigue los Redmi (176,397), Motorola (91,798), Huawei (83,165), Apple (47,732), entre otros.
En el marco de las facultades legislativas otorgadas por el Congreso, en materia de seguridad ciudadana, el Poder Ejecutivo promulgó en septiembre último el Decreto Legislativo N° 1578, que establece duras penas de prisión, hasta por 30 años, para el delincuente que robe un celular en los casos más graves.
De esta forma, el Gobierno busca frenar uno de los delitos más frecuentes que se registra en el país, pero aún no hay resultados visibles.