Al mismo estilo de , un nuevo caso de robo de gasolina por altos mandos del Ejército del Perú salió a la luz ayer cuando cuatro generales de dicha institución fueron detenidos en un megaoperativo.

En víspera del Día del Ejército, que se celebra hoy, cayeron “Los Capos de Diésel”, presuntos integrantes de una organización criminal que habría robado 3 millones 500 mil soles en combustible de manera sistemática entre los años 2013 y 2018.

El fiscal Omar Tello, a cargo del caso, señaló que las investigaciones empezaron a dar su fruto desde el año pasado con la detención de tres miembros y en mayo de este año con la captura de otros seis implicados. Según indicó, se tiene la orden de detención contra 27 personas, 25 de ellas militares.

Ayer allanaron inmuebles en Lima, Arequipa, Cajamarca, Huancavelica, San Martín y Cusco, y se detuvo a 22 sospechosos, entre ellos el general de división (r) Augusto Javier Villarroel Rossi, quien cayó en Lima, y el general de división Carlos Martin Mayca Vásquez, detenido en Arequipa. También cayeron los generales de brigada Moisés Wilfredo Chávez Farfán, en Tarapoto (San Martín), y Jaime Reynaldo Llanos Barrón, en la base de Pichari (Cusco). Un policía también está implicado. Ellos estarán detenidos en la Dirección contra la Corrupción (Dircocor).

“GASOLINAZO”

El fiscal Tello señaló que lo que hacían era “sacar en una van combustible de uno de los grifos del Ejército para luego comercializarlo”.

En el operativo se allanaron casas de los implicados y la sede del Comando de Instrucción y Doctrina del Ejército (Coede), en Chorrillos (Lima), lugar destinado para usar el combustible robado.

“Quienes cometan corrupción no tendrán cabida en el Ejército”, dijo ayer el presidente Martín Vizcarra en la Pampa de la Quinua (Ayacucho).