Un ciudadano identificado como Alejandro López informó a través de redes sociales que no le permitieron a su novia contagiada con COVID-19 internarse en la Villa Panamericana de EsSalud porque no tenían personal de salud que la atienda haciendo uso del lenguaje de señas.

López contó a OJO que el personal le indicó a su tía que no podían recibirla porque no contaban con intérprete en lenguaje de señas y que tampoco querían comunicarse con ella valiéndose de papel y lapicero.

Tras hacer pública su denuncia en redes, personal de EsSalud le escribió para disculparse. “Hola Alejandro, lamentamos los inconvenientes, te escribimos por DM para recopilar tus datos y asistir tu caso. Quedamos atentos”.

Contó que de la institución le comunicaron que su paciente podía internarse desde hoy, pero que él y su familia decidieron que su novia se quede en casa por temor a malos tratos en el centro de aislamiento temporal.

Mi tía explicó que ella (la pareja) era una persona sorda, pero que domina la lengua de señas. También se podía usar papel y lapicero, pero no quisieron nada. Ahora se quedará en casa, yo seré su enfermero, ya bajaron sus síntomas, solo tiene un poco de dolor de garganta y fiebre. Pediré que alguien me preste oxímetro”, dijo a OJO.

LA DEFENSORÍA

Malena Pineda, jefa del programa de Protección de derechos de las personas con discapacidad de la Defensoría del Pueblo, explicó a OJO que toda institución debe asegurar la debida atención a los pacientes con alguna discapacidad.

La única forma que tiene de comunicarse una persona sorda es a través de la lengua de señas. Desde el 2010 se reconoce mediante una ley la obligación de toda institución pública y privada de brindar atención a través de intérpretes”, declaró.

No puede ser que la persona vaya y que el resultado sea que se regrese a su casa, o sea la discriminan. No es posible que no se organicen para que en estos casos inmediatamente se produzca la atención, incluso de manera virtual, ellos se pueden comunicar por medio de videollamadas”, agregó.