Red criminal se ensaña con familia. Una mujer que sobrevivió al ataque a balazos de sicarios durante la fiesta de promoción de su hijo, al que asesinaron junto a su cuñado, fue muerta ayer de certeros tiros en la cabeza por criminales a sueldo en la puerta de su casa, en La Molina. Su hermana, que había resultado ilesa en la matanza, la silenciaron el 31 de diciembre último.
La Policía presume que los autores intelectuales de este crimen buscaban desaparecer a testigos.
A SANGRE FRÍA
Eran las 10:00 a.m. cuando Liliana Huamán Castro (34) salió de su casa ubicada en la cuadra 7 de la avenida Constructores, en el referido distrito. Ella estaba acompañada de su pareja e iban a abordar un taxi por aplicativo que habían solicitado.
En ese momento se acercaron los dos sicarios que estaban en una moto. Uno de ellos, que no llevaba casco, se aproximó a Huamán Castro y le descerrajó tres tiros en la cabeza para después fugar con su cómplice.
Los custodios llegaron hasta el lugar pero se limitaron a certificar su deceso.
MATANZA
En noviembre del año pasado, tres sicarios atacaron a balazos a Rodolfo Alex Pintado Gómez, a su sobrino Marco Antonio Jaime Huamán (18), a Liliana Huamán Castro (33), madre de este último, y a Diana Huamán Castro, tras participar de la fiesta de promoción del muchacho en un local en Santa Anita.
Los dos primeros murieron, la tercera resultó herida en el tórax y la cuarta salió ilesa.
Semanas después, Diana Huamán Castro, esposa de Rodolfo Pintado, quien se dedicaba a la compra y venta de terrenos en Huaral, fue asesinada el 31 de diciembre del 2023 en Chorrillos. Ella y su hermana Liliana eran testigos claves del doble asesinato y las silenciaron.
DATO
Antes del homicidio de Diana Huamán, los investigadores apuntaban a una presunta mafia vinculada al tráfico de terrenos.
