Todo el Perú tiene bien marcado en su calendario y en su memoria el próximo lunes 13 de junio. Fecha en que la selección peruana de fútbol buscará un cupo para el Mundial a Qatar 2022.

Y conforme pasan los días y las horas, la ansiedad y el estrés también aumentan. Todo esto acompañado por un incremento de consultas en el área de cardiología. Y es que por estos días el corazón de los peruanos “late” al límite ante los tan esperados y decisivos 90 minutos reglamentarios del partido que sostendrá la Bicolor con Australia, en Qatar, a la 1 p.m (hora peruana).

MONITOREO

En las 23 primeras semanas de este año (desde enero hasta los primeros tres días de junio) hubo un aumento del 15% de consultas en el servicio de cardiología, en comparación al 2021, en el 60% de los hospitales del país, según Datos Abiertos del Ministerio de Salud.

Pero no solo el fútbol ocasiona que varios compatriotas monitoreen su corazón, sino también se reportan preocupaciones “debido a la crisis política y económica del país”, de acuerdo a las fichas médicas llenadas.

“Hay quienes vienen a ver su corazón para ver el partido tranquilos. Pero también hay quienes están agobiados porque han perdido su trabajo o tienen deudas. A veces vienen con alerta de parálisis facial o preinfartos”, acotó a OJO el médico Mario Solano, cardiólogo del hospital Dos de Mayo.

RECOMENDACIONES

“Si la persona sufre de estrés, tensión, hipertensión (o tiene) glucosa o triglicéridos altos es importante que aproveche el tiempo que queda (al partido) para llevar un cuidado de su medicación y monitoreo”, recomendó el especialista.

Por su parte, Yuri Cutipé, del Instituto Nacional de Salud Mental (INSM), advirtió que ver un partido de fútbol con “excesiva expectativa”, esperando un resultado favorable, genera una presión psicológica en el hincha: estrés elevado.

Aseguró que lo mejor es ver el partido en grupo, ya que permite hablar, gritar y liberar emociones, aunque el resultado final sea negativo.

Otra recomendación es que el hincha respire lentamente para controlar la ansiedad, use frases motivadoras y no esté pendiente del marcador. “Vale más valorar el rendimiento del equipo que los resultados”, acotó.