Hola, soy Magaly Moro y leo todos los días tu caso del corazón para darte un consejo. Siempre protejo la identidad de las personas que me escriben porque esta historia podría ser la de cualquiera.

El amor nos impulsa a ser mejores personas, pero también nos puede cegar y poner contra la espada y la pared. En este espacio recibirás un consejo, el consejo de una amiga anónima. Ojo, esto no es una terapia. En muchos casos sí es importante recurrir a una, ya sea solo o en pareja.

Hoy te cuento la historia de Isabel, de 25 años, que vive en San Miguel:

Doctora Magaly, necesito de su consejo. Sé que usted es la persona indicada para ayudarme con un problema que tengo.

Resulta que en las últimas semanas mi enamorado, Bruno, y yo hemos tenido varias discusiones. Le cuento el motivo. Mi abuela se está quedando en mi casa por un par de meses. Ha venido a visitarnos a mis papás y a mí, pero no ha llegado sola. Ha traído a su loro Loreto con ella.

Mi abuela ama a su lorito. Por eso anda para arriba y para abajo con él. Este animalito tiene una peculiaridad. Resulta que puede hablar. Repite todo lo que las personas dicen, incluyendo los insultos.

Hace dos semanas, Bruno fue a mi casa y mi abuela al conocerlo le hizo una broma. “Mi nieta se merece lo mejor. Espero que no seas un vago ni un tarado como su ex”, le dijo y cuando mi chico se estaba yendo le volvió a decir: “ya sabes, no seas vago, no seas un tarado, Brunito”.

Dos días después mi enamorado volvió a visitarme y al verlo el loro le gritó: “Brunito vago, Brunito tarado”. Desde entonces cada vez que mi chico va a mi casa, el loro de mi abuela lo insulta. Al principio, mi enamorado no le hacía caso, pero ahora ya no tolera los dichos del loro. Se enoja.

“No quiero ir más a tu casa hasta que tu abuela y su loro se hayan ido. Ya no aguanto más a ese animal”, me ha dicho. Desde entonces le reclamo su actitud de niño y eso genera nuestras discusiones. ¿Cómo puedo solucionar este problema?

CONSEJO

Estimada Isabel, puede parecer una exageración, pero es el sentir de tu enamorado. Trata de comprenderlo. Es entendible que si esa situación con el lorito se repetía él se haya incomodado. Te aconsejo que procuren verse fuera de tu casa. Además, recuerden que tu abuelita y su animalito solo estarán por un tiempo más en tu casa. Dialoguen en lugar de discutir. Suerte.

ESCRÍBEME TU CASO A