“OJO, OJO, el diario popular de la mañana... Llegó, triunfó y se vendió como cancha porque es ameno, porque es inteligente, porque es agresivo y porque es picante”, con estas palabras, que formaban parte de una pegajosa canción, el actor y comediante Tulio Loza promocionaba el lanzamiento de este periódico, que empezó a circular el 14 de marzo de 1968 y, desde entonces, se ganó el corazón del pueblo al ser referente de un periodismo veraz y de interés humano.
Se trató del primer comercial que en su ya exitosa carrera, el humorista llevó a cabo vestido como su inolvidable personaje Nemesio Chupaca Porongo, un cholo vivo, audaz y pícaro que llega a Lima y le pasan situaciones disparatadas en las cuales no se deja “pisar el poncho”. “OJO, OJO es un diario popular, ágil, ameno, fuerte, peleador, sale, sale caliente el 14 en la mañana”, cantaba a los televidentes en la pieza publicitaria donde lucía una camisa a cuadros y una gorra.
En la escena del comercial estaba acompañado por la modelo y bailarina más admirada de esos años, Gladys Arista, quien capitaneaba la coreografía y, a la vez, entonaba con encanto el coro: “OJO, OJO, su gran diario popular de la mañana, lo entretiene, lo defiende y solo cuesta 1 sol”. Todo el anuncio transcurría en una escenografía que simulaba ser una calle de Lima, con su antiguo alumbrado público.
Recuerdos de un comercial
“Fue el primer comercial que hice yo y el que se dio el lujo de lanzar a un diario tan extraordinario como OJO”, comenta Loza a sus 89 años al recordar con nostalgia dicha vivencia, que guarda en su memoria y que ha quedado registrada para siempre en YouTube.
“Lo hicimos en un solo tiro, rapidito porque todavía no había el progreso que hay ahora. Era en blanco y negro, inclusive, y en vivo. Fue fabuloso y lindo para mí. Una experiencia extraordinaria”, cuenta al ser consultado sobre los detalles que recuerda.
Ambos personajes elegidos para protagonizar el anuncio conectaban, además, con una de las características principales del nuevo periódico: ser popular. “Gladys era una chica que no era una belleza de 1.80 (metros), pero tenía un ‘sexapil’ extraordinario. Yo llegué a hacer una película con ella”, refiere el actor que también hizo famoso a su personaje de “Camotillo, el tinterillo”.
Por los 57 años de OJO, el reconocido humorista se animó a replicar parte de aquel histórico comercial, esta vez, junto a la modelo y cantante Joscarly Montes de Oca y la modelo y bailarina Natali Cruzado Noa, quienes se animaron a dar unos pasitos de baile. Con similar atuendo al que usó en 1968, cantó con picardía parte de la canción e, incluso, hizo su particular guiñada de ojo, con la que hacía referencia al nombre de este diario. El resultado se encuentra en nuestras redes sociales.
Ojo, un diario para el pueblo
El comediante nacido en Abancay, región Apurímac, recuerda que desde su primera publicación OJO se puso de moda, como los personajes que protagonizaron el comercial en la época de la televisión a blanco y negro. Además, cuenta que los lectores, incluido él, encontraban toda la información que necesitaban sobre la realidad peruana, desde política hasta deportes.
“Te informaba de todo”, refiere, cualidad que este diario mantiene hasta la actualidad a través de sus secciones de Política, Impacto, Metrolima, Policial, Locomundo, Internacional, Power Day, Crack, Ojo Show y Casos del Corazón, que le dan al lector un completo panorama de los sucesos del Perú y el mundo, además de entretenerlo con sus suplementos de juegos “OJO con tu cerebrito”, “Mente Ágil”, “Juega con OJO”, “En Modo Vaclón” y “La Yapita”.
“Yo sigo leyendo todo el diario”, comenta y detalla que con esa información trabaja los diálogos de su confrontacional y querido personaje “Camotillo, el tinterillo”, que sale todos los días a criticar con sátira sobre los errores de la política, a través de Willax. “El humorista debe opinar y su opinión debe ser sólida. Por eso yo siempre me meto contra el Ejecutivo, contra el ‘Chongreso’ y así por el estilo”, expresa.
“Tengo que estar al día en todas las cosas y OJO es mi diario favorito, siempre”, anota Loza sobre este matutino familiar que se lanzó a la calle con la consigna de informar, educar, y entretener al pueblo, característica que siguen definiéndolo en tiempos actuales.
