Ney Chávez Santillán (42), el dueño del chifa Lin Ping que abatió a un presunto delincuente que intentó robar su negocio y amenazó a su familia en Villa El Salvador, teme represalias.
“Dar a conocer a todas las personas que nunca fue mi intención quitarle la vida a alguien, solo actúe en defensa y protección de mi familia, de mi hijo, de mi señora y de mi mismo, de mi propia persona porque estaban siendo amenazados de muerte”, señaló en un video difundido por Latina.
A pesar que el empresario ha vuelto a casa, señala que su vida y la de su familia emocionalmente no ha vuelto a ser la misma. Por ello, ha solicitado a la Fiscalía que archiven lo más pronto posible su caso.
“Pedir a la Fiscalía que revise mi caso bien, que realmente merece ser archivado. Por miedo a las represalias yo no estoy trabajando y he tenido que retirarme por un momento de mi casa, de mi trabajo”, manifestó.
Según el citado medio, Ney Chávez no ha vuelto a reabrir su chifa pues teme que atenten contra su negocio.
“Yo ya no puedo trabajar. Ahorita (el chifa) es mi único medio de ingreso y no puedo trabajar por todo este temor que estoy viviendo con mi familia, miedo que les hagan daño a mi hijo, a mi señora. Tengo que estar así, escondiéndome, no creo que sea justo para uno”, aseveró.
Finalmente, agradeció el respaldo y apoyo de sus vecinos y personas que llegaron hasta los exteriores de la Depincri de Villa El Salvador para exigir su liberación días atrás.