“Un misil balístico intercontinental fue disparado desde la región rusa de Astracán” en un ataque contra la ciudad de Dnipro, en Ucrania, denunció ayer el Ejército ucraniano. Se trata de la primera vez que Moscú usa este tipo de armas desde la invasión en 2022, confirmó a AFP una fuente militar ucraniana.
Horas después, el presidente ruso Vladimir Putin confirmó el ataque con un misil balístico hipersónico sin carga nuclear. “En respuesta al uso de armas de largo alcance estadounidenses y británicas el 21 de noviembre de este año, las Fuerzas Armadas rusas lanzaron un ataque combinado contra una de las instalaciones del complejo militar-industrial de Ucrania”, señaló el líder ruso.
Agregó que de esa manera se probó en condiciones de combate “uno de los nuevos sistemas de misiles de medio alcance, Oreshnik, sin carga nuclear.
Advirtió que la guerra con Ucrania “ha adquirido elementos de carácter global” y aseguró que Rusia está “lista” para cualquier escenario bélico al que le toque enfrentarse. “Si alguien lo duda, se equivoca. Siempre habrá una respuesta”, manifestó.
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“Es una nueva evolución preocupante, y todo va en la dirección equivocada”, dijo ayer Stéphane Dujarric, vocero de las Naciones Unidas sobre el misil ruso lanzado contra Ucrania. Luego reiteró el llamado del secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, para que se ponga fin a la guerra en respeto al derecho internacional.
Estados Unidos acusó a Rusia de ser culpable de la “escalada a cada paso” en Ucrania, incluso por traer tropas norcoreanas para unirse a su esfuerzo bélico.