Magaly Moro

Zoraida (25 años, San Juan de Miraflores). Estimada doctora Magaly, creo estar ilusionada con un hombre a quien aún no conozco personalmente. Puede parecer extraño lo que le digo, pero es real.

Le cuento lo que me está pasando. Desde que lo escuché me quedé prendada de su voz tan varonil, firme y enérgica. Cada vez que habla mi interés por conocerlo crece más. Por él ahora veo más el canal del Congreso de la República y también en YouTube. Sí, doctora, me atrae el señor relator, como suelen llamarlo los parlamentarios.

Tan solo por oírlo me he quedado varias horas enganchada a las sesiones del pleno del Congreso. Cada vez que lo escuchaba pasar lista a los parlamentarios sentía que me derretía. Su voz me dice que es un hombre seguro de sí mismo y sexy. Muero por verlo y conversar con él.

He pensado en pararme en la puerta del local del Poder  Legislativo y hacerme amiga de uno de los guardias para pedirle que me diga exactamente quién es. Pienso abordarlo un día, presentarme y decirle que estoy enamorada de su voz y que me interesaría invitarlo a tomar un café o una copa. Solo espero que no se asuste y que me dé la oportunidad de ser su amiga.

Aunque la atracción que siento por este hombre puede parecer un disparate para el resto del mundo, estoy convencida de que lo que siento es genuino. No creo que mi deseo de acercarme a él esté mal. Uno nunca sabe cómo puede comenzar una historia de amor.

¿Qué opina señora Moro?, ¿cree que pueda conquistar al señor relator?

Ojo al Consejo

Estimada Zoraida, creo que exageras un poco cuando me dices que te mueres por conocer al relator del Congreso.

Te aconsejo que razones con calma lo que sientes y no te dejes llevar por la pasión. Además, debes tener cuidado si intentas acercarte a él. Es probable que el señor sea casado y piense que lo estás acosando. No te dejes llevar por tus impulsos.

TAGS RELACIONADOS