Hola, soy Magaly Moro y leo todos los días tu caso del corazón para darte un consejo. Siempre protejo la identidad de las personas que me escriben porque esta historia podría ser la de cualquiera.
El amor nos impulsa a ser mejores personas, pero también nos puede cegar y poner contra la espada y la pared. En este espacio recibirás un consejo, el consejo de una amiga anónima.
Ojo, esto no es una terapia. En muchos casos sí es importante recurrir a una, ya sea solo o en pareja.
Hoy te cuento la historia de Jimena, de 32 años, que nos escribe desde el Cercado de Lima.
Doctora Magaly Moro, le escribo porque me siento una mujer desdichada, creo que solo sirvo para sanar a los hombres de sus traumas amorosos y dejarlos listos para que se enamoren, pero de otra mujer.
No sé si usted ha oído hablar de que existe la pareja para toda la vida y la pareja del proceso, bueno, yo siempre soy la del proceso. Las parejas que he tenido me han terminado para luego encontrar el verdadero amor en su siguiente relación y casarse.
Hace 10 años salía con un hombre mayor que yo. Renzo parecía muy enamorado de mí, pero yo no sentía que era el amor de mi vida, así que cuando me propuso casarnos le dije que no y terminamos. A los pocos meses conoció a otra chica y se casó en menos de un año y formó su familia.
Después conocí a Benjamín. Él venía de una relación tóxica y no buscaba comprometerse; yo insistí en “ayudarlo” a superar su pasado y nos hicimos enamorados. Nuestra relación duró tres meses y terminamos. A los pocos meses me enteré que salía con una compañera de su trabajo. Su relación duró varios años y ahora es su esposa. Prácticamente yo lo sané del miedo al compromiso y se fue con otra.
Luego conocí a Percy. La química fue inmediata, pero él no busca una relación formal, igual salí con él con la esperanza de hacerle cambiar de idea. Nuevamente caí en el error.
Salimos casi un año, éramos amigos con derecho, pero como yo veía que lo nuestro no tenía futuro lo dejé. A los meses le presentó a todo el mundo a su nueva pareja, al poco tiempo la embarazó y al final se casaron.
Doctora, no creo que lo mío sea coincidencia. Mis tres últimas relaciones quedaron en nada conmigo pero después encontraron el amor y se casaron. ¿Usted cree que hago algo mal o tengo mala suerte?
CONSEJO
Querida Jimena, no creo que tengas mala suerte, lo que sí estoy segura es que no haces buenas elecciones. En las tres relaciones que me cuentas en tu carta, ninguno de los dos buscaba lo mismo. Cuando elegimos pareja es importante que ambos quieran lo mismo en una relación. La próxima vez que salgas con alguien asegúrate que la otra persona quiera y sienta lo mismo que tú. Suerte.