Hola, soy Magaly Moro y leo todos los días tu caso del corazón para darte un consejo. Siempre protejo la identidad de las personas que me escriben porque esta historia podría ser la de cualquiera.

El amor nos impulsa a ser mejores personas, pero también nos puede cegar y poner contra la espada y la pared. En este espacio recibirás un consejo, el consejo de una amiga anónima. Ojo, esto no es una terapia. En muchos casos sí es importante recurrir a una, ya sea solo o en pareja.

Hoy te cuento la historia de Ana, de 28 años, quien vive en el distrito de Surco:

Doctora Moro, soy seguidora de su columna desde hace mucho tiempo y confío mucho en su criterio, por eso recurro a usted para pedir su consejo sobre un tema que me está molestando.

Hace un tiempo, mi esposo Piero y yo tuvimos una discusión sobre la música que escucho. Resulta que me encanta el cantante Camilo; sus canciones me transmiten mucha energía y me hacen sentir feliz. Pero lamentablemente, mi pareja no soporta sus letras, dice que son muy cursis y clichés. Incluso, cuando estamos juntos, me prohíbe poner su música porque la considera ridícula y poco auténtica.

No soporto su actitud, pero lo que más me molesta es que, dentro de poco, asistiré a un concierto de Camilo, y tengo muchas ganas de corear todas sus canciones. Pero cada vez que trato de hablar sobre el tema con mi marido, se muestra indiferente y poco comprensivo. Me siento reprimida y, sinceramente, me parece egoísta que me prohíba disfrutar de algo que me gusta tanto solo porque a él no le gusta.

He intentado explicarle que la música de Camilo me hace sentir bien y que quiero disfrutarla sin que me lo impongan, pero no me entiende. Me pone tan triste esta situación, porque muchos de los temas de Camilo se los he dedicado a mi pareja en secreto. Estoy confundida y no sé si estoy exagerando. ¿Qué me aconseja, doctora?

CONSEJO

Querida Ana, es importante que tu pareja respete tus gustos y pasatiempos, así como tú respetas los suyos. La música es una forma de expresión personal. Habla con Piero de forma calmada, explicándole cómo te hace sentir escuchar a Camilo y que tu deseo de disfrutar su música no tiene que ver con desinterés hacia él. La comprensión mutua es clave.