Hola, soy Magaly Moro y leo todos los días tu caso del corazón para darte un consejo. Siempre protejo la identidad de las personas que me escriben porque esta historia podría ser la de cualquiera.

El amor nos impulsa a ser mejores personas, pero también nos puede cegar y poner contra la espada y la pared. En este espacio recibirás un consejo, el consejo de una amiga anónima. Ojo, esto no es una terapia. En muchos casos sí es importante recurrir a una, ya sea solo o en pareja.

Hoy te cuento la historia de Ruth, de 42 años, que nos escribe desde Lince.

Doctora Magaly Moro, estoy muy preocupada por la actitud de mi esposo, quien se ha obsesionado con tener un cuerpo escultural y para lograrlo se ha sometido a una rigurosa rutina de ejercicios en el gimnasio. Temo que termine perjudicando su salud.

Marco tiene 45 años, y si bien en su juventud se dedicó al deporte, lo dejó por una lesión en la columna. Nada grave, pero tuvo que reducir al mínimo su actividad física. Además, con la llegada de nuestros hijos y la vida poco activa por el trabajo y las responsabilidades del hogar empezó a subir de peso.

No está obeso, pero sí le ha salido barriguita. En lo particular a mí no me desagrada, mi marido me sigue resultando atractivo. Nuestra vida íntima no se ha visto afectada, pero él me dice que se siente algo pesado y teme que un día no pueda responderme en la cama.

A raíz de esa preocupación, decidió inscribirse en el gimnasio. Empezó asistiendo tres veces por semana. Los resultados se empezaron a ver al mes de ejercitarse, no solo en su aspecto físico, sino también en su rendimiento sexual. Ahora nuestros encuentros íntimos son más duraderos y mi esposo me deja plenamente satisfecha y yo a él

Ahora se ha obsesionado con hacer más ejercicios. Va todos los días al gimnasio, se somete a rutinas exigentes y temo que pueda volver a lesionarse. Ya le dije que le baje la intensidad a sus rutinas, que no es un chiquillo de 20 años y podría dañar su integridad física.

Doctora, no sé qué hacer para que mi esposo reaccione y se preocupe por su salud.

CONSEJO

Querida Ruth, entiendo tu preocupación por tu esposo. Habla con Marco para que consulte con un médico y evalúe su salud física para saber si la rutina que cumple en el gimnasio es adecuada para su edad. Ejercitarse es bueno, pero debe ir acorde con cada etapa de la vida, y las rutinas deben ser supervisadas por un especialista para evitar accidentes. Suerte.