“Ellos son sospechosos y deben estar presos”

Joseph Velásquez Fernández, Edgar Pozo Velarde y Bryan Arenas Vivas, amigos de la desaparecida ingeniera geográfica Shirley Villanueva Rivera, se presentaron ayer en la Divincri San Miguel en calidad de citados. Estaba previsto interrogarlos, pero el fiscal decidió suspender la diligencia por no tener elementos necesarios para pedir los testimonios de los jóvenes.

Sin embargo, para la familia de Shirley, ellos son los principales sospechosos de su desaparición, por lo que piden que se ordene su detención inmediata.

El primero en llegar a la sede policial fue Joseph Velásquez, quien se presentó con su abogado a las 7:40 de la mañana. Luego lo hizo Bryan Arenas y, finalmente, Edgar Pozo. Estos últimos también acudieron con sus respectivos abogados.

La familia los encaró en la puerta, tanto al inicio como al término de la diligencia. Los acusaron abiertamente de haber embriagado y asesinado a Shirley en la playa Marbella de San Miguel, adonde fueron tras ver el partido entre Perú y Venezuela el jueves 23 de marzo.

No bastaron las palabras de indignación contra los muchachos, quienes prefirieron retirarse en silencio. Hubo también puñetes, manazos y patadas.

Flor Rivera, tía de Shirley, se lanzó enfurecida contra Edgar Pozo. Le dio un patadón a la altura de la cintura. “Es un maldito, ni se ha acercado a pedir disculpas, ¿cómo es posible que esté libre?”, exclamó en medio del llanto.

El fiscal Rubén Ulloa Gavilano, de la Fiscalía Penal de Magdalena, suspendió los interrogatorios.

Ellos serán citados nuevamente la próxima semana.

deben ir presos. “Hemos pedido que ordenen su impedimento de salida de Lima. El fiscal ya ha acogido nuestra solicitud ante la posibilidad de que los implicados puedan escapar”, declaró Álvaro Peláez, abogado de la familia de Shirley.

La Fiscalía también ha solicitado que se les realice una pericia psicológica a los tres jóvenes.

La Fiscalía también ha solicitado que se les realice una pericia psicológica a los tres jóvenes.