'Ley Pulpín' es derogada por la presión juvenil
'Ley Pulpín' es derogada por la presión juvenil

El poder de las calles y el repudio mayoritario de la opinión pública hizo que el Congreso, incluso con votos de decenas de legisladores que “cambiaron” de opinión, retroceda y derogue ayer la Ley 30288 (Ley que Promueve el Acceso de Jóvenes al Mercado Laboral y a la Protección Social), norma que fomentaba la contratación de personas de 18 a 24 años con derechos laborales recortados, sin compensación por tiempo de servicios (CTS), ni gratificaciones anuales.

El debate duró algo más de cinco horas y de nada sirvió el ofrecimiento del nacionalismo para modificar el dispositivo e incluir derechos antes mutilados, porque mientras se discutía el dispositivo se registraba una masiva movilización de jóvenes hacia el Palacio Legislativo.

En esta quinta jornada de protesta, al igual que en las últimas manifestaciones, los jóvenes marcharon junto con organizaciones sindicales bajo la consigna de exigir la derogación de la llamada “Ley Pulpín”.

Aunque en junta de portavoces se acordó que los seis proyectos de ley en torno a la “Ley Pulpín” podrían votarse hasta las diez de la noche, una cuestión previa planteó definir de una vez por todas la suerte de la norma laboral que desde hace varias semanas estaba muerta por el rechazo ciudadano, sobre todo entre los jóvenes a quienes aparentemente se pretendía beneficiar con trabajos en los que se les aceptaría sin CTS ni gratificaciones, en el marco de la llamada “flexibilización” del derecho laboral.

Al ponerse al voto la derogación de la Ley 30288, una vez retiradas las propuestas de modificación o suspensión (esta última del fujimorismo), 91 congresistas votaron a favor, 18 en contra y cinco de abstuvieron. La “Ley Pulpín” fue derogada y hoy se confirmará al publicarse la norma que la abroga.

Celebración juvenil

Por la derogación votaron fujimoristas, algunos perúposibilistas y hasta los congresistas nacionalistas Omar Chehade y Marisol Espinoza, todos ellos recordados por votar a favor de la “Ley Pulpín” cuando se aprobó con gran mayoría el año pasado, incluso con votos del Apra que ahora celebra la abrogación.

Al conocer lo decidido en el Congreso, los jóvenes que se movilizaban por las calles celebraron con algarabía y bailaron en la vía pública.

El dirigente del colectivo 18D, Jorge Rodríguez, confirmó que la derogación de la “Ley Pulpín” es el inicio de nuevas luchas por los derechos laborales de los peruanos.

Destacó que las marchas obligaron a que muchos congresistas retrocedan en su inicial apoyo a la “Ley Pulpín” y que los gobiernos deben escuchar siempre a la población.

La juventud que se movilizó durante semanas pacíficamente celebró un triunfo que le hace tomar protagonismo en la historia política y laboral de nuestro país.