Doctor Pedro Mascaro explicó que hemodinámicamente bebés se encuentran estables, responden en forma normal y en los próximos días les darán de alta.
Siempre juntas. Las siamesas Milagros Lorena y Ruth Lorena Guelac Huamán, de seis días de nacidas, no podrán ser separadas, pues el solo intento podría poner en peligro sus vidas, confirmó el director del Instituto Materno Perinatal (ex Maternidad de Lima), Pedro Mascaro Sánchez.
Esto debido a que el último informe tomográfico confirma que las bebés están unidas por el tórax, diagnóstico conocido con el término médico de Toracopago, comparten órganos vitales como el corazón, hígado y los intestinos, lo que impide cualquier esperanza de intervención quirúrgica.
Las hermanitas sólo tienen los pulmones y riñones de forma individual, lo cual ha permitido que superen positivamente la infección respiratoria que las estuvo afectando.
'En este momento se encuentran hemodinámicamente estables, son niñas que responden de forma normal, si no estarían unidas serían como unas bebés comunes, su salud es favorable y esto permitirá que en unos días les demos de alta', dijo el galeno.
En otro momento, el director del Departamento de Neonatología, Carlos Alvarado, informó que las siamesas serán tratadas en el Instituto Nacional del Niño (ex Hospital del Niño), donde las someterán a rigurosos exámenes para analizar su evolución y ver si padecen algún otro problema.
'La mayoría de siameses son afectados por males congénitos, lo cual acorta su tiempo de vida. Estas pequeñas necesitan cuidados y atención especial, sobre todo en los primeros meses de vida', explicó.
DIOS LO QUISO ASI
Juan Guelac y Josefa Huamán, ambos de 20 años y naturales de Amazonas, son los padres de las siamesas y aunque se muestran sorprendidos por todo lo que viven, están dispuestos a luchar contra viento y marea con tal de preservar con vida a sus pequeñas.
'A los cinco meses de gestación me diagnosticaron un embarazo siamés y desde ese momento no ha habido día en que no piense en mis hijas, las amo y si no hay posibilidad de separarlas, les tendré que enseñar a vivir juntas', expresó la joven madre.
Agregó que les dará todo su amor, aunque hubiera querido que las separen para que sean independientes como cualquier niño. 'Pero si Dios me las mandó así, así las voy a querer.
Ellas son mi primera experiencia como madre y las voy a proteger con mi vida, ya quiero darles de lactar porque tengo mucha leche', prosiguió llorosa. 'Las he visto inquietas. Me dan pena. Una es gordita, blanquita y llorona, y la otra es más tranquila y pequeñita. Son lindas', añadió.
Por su parte, Juan, el papá, dijo: 'Amamos a nuestras hijas. Yo era comerciante informal, vendía cositas para sostenernos, pero ahora he abandonado mi trabajo porque tengo que estar con mi esposa y mis hijas. Quisiera que alguien nos ayude, que me den un trabajo estable, es lo único que quiero'.