Su cultivo se masificó hacia mediados del siglo XX y actualmente se cultiva en todos los continentes. Es un fruto pequeño de forma ovalada, piel aterciopelada y de pulpa cristalina, carnosa y muy jugosa. Puede cargar en el centro 2 a 3 semillas.
Si bien no es muy rica en vitaminas y minerales, salvo por los carotenos que le dan la coloración anaranjada y el potasio, típico de las frutas; su mayor aporte está en el agua, fibra y ácidos orgánicos que contiene, además es bajo en calorías, cada unidad de níspero aporta cerca de 26 calorías, una ración puede estar representada por unas 3 a 4 unidades.
La piel no suele consumirse y la mejor manera de comer níspero es cuando está fresco, aunque también se preparan mermeladas, entre otros potajes. El 78% de la fruta es agua y entre sus ácidos orgánicos hay taninos, que dan un efecto astringente similar al del membrillo de manera que puede ser conveniente para sumar hidratación y mejorar la diarrea, más no controlar la causa.
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