El periodista de Cuarto Poder, Eduardo Quispe, ratificó que junto con su compañero fueron secuestrados por ronderos de Cajamarca. (Captura: América Noticias)
El periodista de Cuarto Poder, Eduardo Quispe, ratificó que junto con su compañero fueron secuestrados por ronderos de Cajamarca. (Captura: América Noticias)

Ya sabíamos que el gobierno de Pedro Castillo, monigote de Vladimir Cerrón, como ocurre en dictaduras como la de Nicolás Maduro en Venezuela, desde el primer día iba a lanzarle cualquier cantidad de púas a los periodistas y atentar contra la libertad de prensa, y no son pocas las veces que ha azuzado a sus seguidores a despotricar de los medios de comunicación. Pero esta vez, ese su “pueblo”, los ronderos de que tanto habla y hasta se considera uno de ellos, se pasó de la raya al secuestrar en Cajamarca a un equipo del programa de Cuarto Poder encabezado por el colega Eduardo Quispe. Como bien apunta El Comercio en su portada, diversas personalidades (y también los gremios periodísticos) “remarcan que este es el colofón al discurso violentista del Ejecutivo contra los medios”. En la víspera la “Ley mordaza”, el miércoles la afrenta a la libertad de expresión y la pregunta es: ¿Qué viene después? Gran favor que le haría Castillo al país si agarra sus chivas y se va con sus ronderos.