Los escolares de Lima y Callao se han visto obligados a recibir clases virtuales, o remotas, según la explicación del ministro de Educación Morgan Quero, por la realización de la Cumbre Apec. Según Heli Ocaña, exdecano del Colegio de Profesores del Perú, estima que 6 de cada 10 niños no han podido estudiar por falta de recursos, porque no todos disponen de celulares, laptops y conexión a internet. Este diario tuvo información de padres de familia de Comas y Villa María del Triunfo que han tenido que hacer malabares para conseguir que sus hijos se conecten a alguna red WIFI y otros gastar hasta 30 soles diarios para conectarse a internet. En un país donde hay una marcada diferencia en el acceso a la información, es un despropósito que las autoridades prácticamente hayan privado de sus clases presenciales durante una semana a miles de niños. ¿Quién les devolverá el tiempo perdido? Si lo que se buscaba era reducir el tráfico en la capital durante el desarrollo de la cumbre APEC, lo correcto hubiera sido suspender las clases en los distritos donde se desarrollará el evento. No enviar a toda la capital a su casa. Parecen improvisados.