La difusión de los audios, donde se evidenciarían los actos de corrupción y los arreglos bajo la mesa entre Zamir Villaverde, Bruno Pacheco y el exministro de Transportes y Comunicaciones, Juan Silva, han destapado lo que para la investigación fiscal se trataría de una organización criminal, enquistada en el MTC y encabezada por el presidente Pedro Castillo. La pus empezó a saltar y el pueblo peruano está asqueado. No tolerará más la corrupción. Por ello, ayer miles de personas en Lima, Trujillo, Chiclayo, Arequipa, entre otras ciudades, alzaron su voz para decir “¡Fuera, Castillo, fuera!”. Unos le pedían que renuncie otras clamaban la vacancia, y hubo quienes hasta planteaban marchar directo a Palacio para desalojar al mandatario. El pueblo ya se levantó, se cansó de que le metan la mano al bolsillo. Quieren un cambio, y quienes están en el Congreso deben escuchar el clamor popular y no mirar al costado, pensando en sus intereses. Basta de arreglos políticos. Toca pensar en el pueblo, al cual el dinero no le alcanza para cubrir la canasta familiar.