Incluir pescado en la cena navideña es una elección ligera y nutritiva, perfecta para equilibrar el festín. Este alimento aporta proteínas de alta calidad, esenciales para el mantenimiento y la reparación de los tejidos, y es rico en ácidos grasos omega-3, conocidos por sus beneficios para la salud del corazón y el cerebro. Además, su digestión es más ligera en comparación con las carnes rojas, lo que ayuda a evitar molestias después de la cena.
El pescado también es versátil en la cocina: puedes prepararlo al horno, a la parrilla o incluso como ceviche, ofreciendo combinaciones frescas y festivas. Además, es bajo en calorías, ideal para quienes buscan disfrutar sin excederse. Acompañado de vegetales o ensaladas, el pescado es la estrella perfecta para una Navidad sabrosa y saludable.
Es también una excelente manera de fomentar la inclusión del pescado en el menú familiar.
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