Aunque copia del festival español de la Tomatina (que se desarrolla en Buñol), esta semana en la localidad de Sutamarchán, departamento de Boyacá, en el norte de Colombia, se desarrolla la décimo quinta edición del festival de lanzamiento de tomates.
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La fiesta de los tomates en Colombia incluye cabalgatas, desfiles, carrozas, música y artesanías.
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La fiesta acaba con el lanzamiento de tomates no aptos para el consumo humano, desechos de los cultivos, en medio de sonrisas de los participantes.
Fuera de consumo
Heinner Suárez Suárez, presidente y fundador del festival, explicó en diálogo con La FM, que los tomates utilizados no son aptos para el consumo humano. Provienen de la recolección realizada por campesinos y voluntarios una semana antes del evento, en los invernaderos locales.
“De cada 20 cajas de tomate que recoge el productor, una o dos están dañadas. Esos tomates no se venden ni se consumen”, señaló Suárez.
Ambientalismo
Se trata de tomates pasados de maduración, golpeados o en mal estado, que de no ser retirados podrían contaminar el suelo, el agua y el ambiente.
“Recoger estos tomates no solo garantiza la diversión, también es un ejercicio de responsabilidad ambiental [...]. Si se dejan en el invernadero, contaminan el entorno. Por eso los recolectamos y los destinamos a la Tomatina”, aseveró.
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