Levantarse de la cama cargada de vitalidad y con una sonrisa de lado a lado es una misión prácticamente imposible para muchas personas. Sin embargo, tenga en cuenta que las costumbres matutinas, ya sean buenas o malas, condicionarán el resto de su día.

Aunque las primeras horas son determinantes, lo que suceda en la madrugada y una noche antes también influyen de manera importante. Por ello, se recomienda comer ligero antes de acostarse y no tomar mucha agua de noche , ya que puede activar su vejiga durante la madrugada y despertarlo. Asimismo, dormir mínimo ocho horas diarias sin interrupciones. Una vez claro esto, siga los siguientes hábitos saludables que transformarán su manera de despertar:

1. Despierte temprano: Si está acostumbrado a dormir entre 10 horas a más, lo único que hará esto es sentirse más cansado y pesado durante el resto del día. En su lugar, levántese dos horas antes del inicio de su jornada laboral o clases en línea. Así podrá disfrutar más tiempo para usted y realizar actividades que disfrute como yoga, leer o ver alguna película.

2. Hidrátese: Mientras más temprano lo haga, mucho mejor. Beber agua al despertar mantendrá su nivel de electrolitos a raya. Si lo desea, puede dejar una botella o vaso con agua a lado de su cama para no olvidar este paso tan fundamental.

3. Medite: Antes de pensar en las actividades que tiene que hacer, respire profundo y despeje su mente. No es necesario que se estrese tan rápido, ya que no es saludable para su salud mental. Le aconsejamos escuchar algún podcast o vídeo en Youtube que lo ayude a reducir la ansiedad.

4. Haga ejercicio: Puede dar mucha pereza de tan solo pensarlo, pero hará una gran diferencia durante el resto del día. Empiece por ejercicios simples como saltar la soga, caminar por la sala o salir a correr. Si es una persona más experimentada con la actividad física, realice su rutina de ejercicios como usualmente lo hace. Además, ducharse luego lo ayudará a relajarse.

5. Desayune tranquilamente: Es la comida más importante del día y no debe saltearla por ningún motivo. Por lo general, cuando uno se levanta apurado y en prisas suele pasar por alto esta comida y continuar su rutina como si nada pasara, lo cual es un error.