Con la llegada de la primavera, el sol ya ilumina con intensidad el cielo limeño y cada vez es más difícil permanecer sin una gota de sudor. Ante ello, el brillo en la frente, nariz y barbilla no se ha hecho esperar, más aún aquellas personas con piel grasa. Sin embargo, las mujeres de Oriente tienen un truco milenario que tú también puedes replicar desde casa: el polvo de arroz.
Esta potente preparación te ayudará a calmar irritaciones en la piel, combatir el acné y lucir un acabado mate, perfecto para combatir los días calurosos. ¿Lo mejor de todo? Es completamente natural y todo lo podrás encontrar en tu mercado más cercano. Por eso, echa un vistazo y prepáralo desde casa.
Pasos a seguir
1. Primero, toma una taza de arroz blanco, previamente lavado y libre de impurezas, y déjalo secar en un lugar fresco.
2. Cuando esté seco, llévalo en una sartén a fuego medio para dorarlo. Revuelve constantemente hasta que éste cambie de color y tenga un tono muy parecido al tuyo.
3. Retira del fuego y licua el arroz en una licuadora o procesadora. Recuerda que todo debe quedar hecho polvo.
4. Luego de eso, pasa el polvo por un colador muy fino para quitar los grumos y cualquier otro resto.
5. Finalmente, pon el polvo en el recipiente de tu preferencia. Si lo deseas suelto, simplemente déjalo así. Por el contrario, si quieres que sea como un polvo compacto, aplasta la preparación con una servilleta hasta obtener la forma plana.