La aparición de es un motivo de preocupación para muchas mujeres, ya que está ligado al envejecimiento. Sin embargo, algunas jóvenes ya gozan de unos cuantos cabellos blancos en la melena y ni siquiera pasan los treinta años.

Todo esto se debe a la disminución de la producción de melanina, el pigmento encargado de darle el color característico al cabello. Aunque las primeras canas aparecen entre los 20 y 30, estas no deben ser en gran cantidad y es necesario ralentizar su crecimiento.

A continuación, le presentamos algunos consejos para evitar su temprana aparición, sin la necesidad de arrancarlos desde la raíz con una pinza.

Consuma mucha vitamina B: Esto activará los melanocitos, células encargadas de mantener una producción de melanina óptima. Puede encontrarlo en alimentos como pescado, frutos secos, yema de huevo o vísceras.

Evite fumar: Varios estudios demuestran que existe una relación entre la caída del cabello con el consumo del tabaco. Por ello, para evitar que las sustancias tóxicas del cigarrillo afecten su cuero cabello, lo mejor será abandonarlo.

Proteja su melena del sol: Así como los rayos solares afectan su piel, también lo hará con su cabello. Por tal, utilice sombreros y productos con filtro solar en su melena. O, del mismo modo, use mascarillas revitalizantes.

No se estrese: Expertos consideran que la constante preocupación puede desencadenar su aparición. De acuerdo con un estudio de la Universidad de Harvard, el estrés activa los nervios cerebrales, lo que a su vez causa daño permanente a las células madre regeneradoras de pigmento en los folículos capilares.

Aplique tratamientos: Especialmente si son a base de productos naturales como la palta, aceite de coco, romero o cebolla. Todo esto evitará la aparición de canas y, además, fortalecerá su cabello.