Maquillarse puede realzar lo mejor del rostro, pero algunos errores logran justo lo contrario y hacen que la apariencia luzca con unos años de más. Tonos mal elegidos, exceso de producto o detalles mal pensados pueden sumar años sin querer. Tome en cuenta estos tips que ayudan a evitarlo.
BASE PESADA. Las bases de alta cobertura y acabado mate pueden asentar producto en las líneas, acentuar arrugas y darle un efecto “máscara”. Lo mejor es elegir fórmulas ligeras, con acabado radiante y aplicar con esponja húmeda para un aspecto natural y fresco
POLVOS EN EXCESO. Usar demasiado polvo matificante puede secar la piel y acentuar líneas finas, especialmente bajo los ojos. Si necesitas sellar, opta por capas ligeras básicas y presiona con brocha para evitar el exceso .
DELINEADO INTENSO. Trazar una raya oscura en la línea de agua o en el párpado inferior hace que los ojos se vean más pequeños y cansados. En su lugar, conviene usar tonos suaves como marrón o gris y delinear justo en la base de las pestañas para abrir la mirada sin endurecerla.
OJOS BRILLANTES. Sombras metálicas o muy luminosas resaltan pliegues y arrugas. Los acabados mate o satinados en tonos neutros favorecen más.
CORRECTOR MUY CLARO. Un corrector demasiado liviano en ojeras puede iluminarlas mal, hacerlas lucir hundidas y remarcar las imperfecciones.
CEJAS MARCADAS. El estilo de cejas muy marcadas o oscuras endurecen la mirada. Lo ideal es rellenarlas suavemente con polvo o lápiz.
FALTA DE HIDRATACIÓN. Saltarse la hidratación provoca que el maquillaje se asiente en imperfecciones y agrande las arrugas.
OJO AL DATO. Colocar el rubor muy cerca de la nariz o en zonas bajas puede dar un aspecto apagado. Aplicarlo en las mejillas y difuminar hacia las sienes.
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