El es uno de los cosméticos más antiguos y, aunque parece sencillo usarlo, muchos cometen diversos errores que solo hacen que el aroma dure menos o se vuelve demasiado empalagoso para los demás. Si deseas emanar un olor delicioso y que las personas de tu alrededor lo perciban así, entonces sigue leyendo.

1. Frotar el perfume entre las muñecas: Debes dejar de hacer esto, pues rompe la estructura de las notas de tu perfume favorito y solo hace que la fragancia se evapore con los minutos.

2. Dejar de lado la humectación: Para alargar la fijación del perfume, tu piel deberá estar bien hidratada para capturar y conservar el aroma. Si es posible, usa la misma crema que viene en conjunto con la fragancia para aumentar el nivel de horas de duración.

3. Abusar de él: No es necesario que eches demasiado para oler bien. Además de derrochar el producto, también incomodarás a las personas de tu alrededor. Recuerda que con 3 a 4 aplicaciones a 30 centímetros de ti es más que suficiente.

4. Rociarlo solo por la ropa: Si notas que tu fragancia no dura nada, es probable que lo estés usando de la manera incorrecta. No debe ser echado sobre algodón o cualquier otro tipo de tela sintética, sino sobre la piel totalmente desnuda y con mayor concentración de sangre, es decir, muñecas, cuello, escote e incluso rodillas.

5. Comprar demasiados: Es probable que tengas más de un perfume y solo uses algunos de vez en cuando. Si es así, te recomendamos que los utilices con más regularidad, pues corres el riesgo de que el oxígeno entre en su interior y descomponga algunas notas de la fragancia. Si eres una coleccionista, es aconsejable adquirir fragancias en botes más pequeños.

6. Exponerlo a la luz: Evita que tu perfume esté a lado de una ventana y aléjalo de cualquier fuente de calor, ya que la calidad del producto se verá alterada y puede que lo huelas diferente. En su lugar, guárdalo en la nevera para mantenerlo fresco y totalmente intacto.