¿Qué hacer cuando nuestro pequeño angelito hace rabieta?
¿Qué hacer cuando nuestro pequeño angelito hace rabieta?

Entre los 2 y los 4 años la gran mayoría de niños hacen berrinches o rabietas, aunque pueden ser menos frecuentes en otros.

Puedes no pasar por rabietas, organizando la vida de tu hijo, de forma en que la frustración y enojo no tengan lugar. Con una vida organizada el sabrá que debe dejar de jugar porque tiene que comer, debe parar de ver televisión porque llegó la hora de su baño y tendrá una rutina que lo ayudará no sólo mientras sea pequeño sino a ser organizado cuando sea adulto.

Si ya tenemos un niño que hace rabietas constantes, te damos algunos consejos para controlarlos:

No intentes discutir con tu hijo: Mientras la rabieta dura, tu pequeño está más allá de la razón, hacerlo entender sera en vano. 

No le contestes gritando: Intenta no participar en la rabieta. Si lo haces, probablemente la prolongarás, ya que cuando comience a calmarse, se dará cuenta del tono enojado de tu voz y comenzará de nuevo.

No des ninguna recompensa ni castigo por una rabieta: Debes hacer que se dé cuenta que con la rabieta que hizo no logrará nada, ni para bien ni para mal, eso si, ¡nunca! cambien de opinión por una rabieta, si dijiste no, es NO. Si le das gusto, automáticamente relacionará sus rabietas con premio. Si tenias planeado salir, sigue con tus planes, de esa forma, el niño se  dará cuenta que de nada vale llorar, gritar y patalear. 

No dejes que las rabietas en público te hagan sentir mal. Muchos padres temen las rabietas en lugares públicos; sin embargo, no debes dejar que tu hijo sienta esta preocupación. Tu pequeño angelito se dará cuenta de lo que está pasando y una vez que tu hijo se dé cuenta de que sus enojos incontrolables tienen un efecto en tu comportamiento hacia él, aprenderá a usar su rabieta según su conveniencia. 

Distráelo con otra cosa. Si se ha empeñado en abrir una y otra vez la refi y le hará daño, en voltear los tachos de basura o agarrar la manguera y mojar todo lo que ve incluyendolo y está a de hacer rabieta porque no dejas que haga travesuras, distráelo con algo que sabes que le encanta, como bailar, cantar, jugar con plastilinas, legos o dibujar. Este truco sólo funciona si eres muy rápida y si le hablas y actúas de un modo muy amigable.

Utiliza menos el "no": Puedes sustituir algunos de tus “no” por palabras como “¡si, pero después de comer!” o “¡dentro de un rato!”, el nene se frustrará menos y al hacer otras cosas es probable que hasta se olvide.

Querida mamá, no olvides que con amor y paciencia podrás domar a tu ´pequeño angelito´ a ser un niño muy bien portada y un futuro gran ser humano. Recurrir a golpes no es la solución, sólo hará un niño triste y frustrado.

Podría interesarte: