¿Quiénes son los vampiros de tu energía?

Ciertas personas te hacen sentir contenta y optimista, lista para enfrentar los retos de la vida y dar lo mejor de ti. Otras, en cambio, necesitan tan solo un momento en tu compañía para dejarte exhausta, aburrida, irritada, ansiosa, abrumada o deprimida. Si alguien que conoces es del segundo tipo, hay grandes posibilidad de que estés tratando con un vampiro de energías. Reconocerlos no siempre es fácil, pues no tienen grandes colmillos ni capas negras para ocultarse. Sus armas son más bien emocionales, al igual que su camuflaje.

Los vampiros de energía pueden ser familia, amigos, clientes, colegas, profesores, vecinos, amantes o extraños y tienen diferentes tipos. Entre ellos destacan:

1. La víctima. Es quien culpa a todo el mundo sin asumir ni una sola vez su responsabilidad sobre lo que le molesta. Que no te sorprenda que busquen hacerte sentir culpable de algo.
2. Los celosos. Realmente no pueden sentirse contentos por nadie. Envidian el éxito y la alegría de los demás. A sus ojos, nadie puede ser feliz, ni siquiera tú. Obviamente, ellos tampoco lo son.
3. Los inseguros. Su baja autoestima deprime o bien desespera. Lo peor es que puede ser contagiosa.
4. Los aguafiestas. Parecen incapaces de divertirse y tomarse la vida relajadamente. Con estas personas estás condenada a aburrirte.
5. Las reinas del drama. Para ellas, cualquier excusa es válida para hacer una escena donde la victimización también juega un rol importante. Estas personas aman el escándalo y eso cansa a cualquiera que esté a su lado.
6. Los temperamentales. Explotan ante la más mínima razón. Necesitarás una paciencia y tolerancia de oro para mantener un estado de mente zen ante sus rabietas.