¡Grave denuncia! Vin Diesel, reconocido por su emblemático papel como Dominic Toretto en la saga Rápidos y Furiosos, se encuentra en el ojo de la tormenta legal debido a una demanda interpuesta por su exasistente, Asta Jonasson en la que acusa al actor de agresión sexual.
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La acusación, presentada ante el Tribunal Superior de Los Ángeles, sostiene que el actor habría cometido agresión sexual contra Jonasson durante el año 2010, durante la filmación de la película “Rápidos y Furiosos: 5in Control”.
¿Qué dice la demanda contra Vin Diesel?
Según el documento judicial, Vin Diesel habría forzado a Jonasson a entrar en su suite de hotel para “masturbarse frente a ella”. La demanda señala que el actor habría ignorado las “claras declaraciones de no consentimiento” de la joven, quien “gritó y corrió hacia un baño cercano”.
Además, según precisa la parte judicial “Vin Diesel la inmovilizó contra la pared con su cuerpo”, y Jonasson intentó liberarse del actor por no lo logró debido a la diferencia de fuerza de ambos. “Ella estuvo intentando disociarse deseando que la agresión terminara”, sostiene la demanda.
Ambiente laboral hostil
La exasistente, además de acusar al actor, ha incluido en la demanda a One Race Productions, la empresa de Diesel, y a Samantha Vincent, hermana del actor y presidenta de la mencionada compañía en ese momento. La presunta víctima afirma que tras la agresión, Vincent la despidió calificándola como un “pasatiempo” de su hermano, e indicó que existió “un ambiente de trabajo hostil, supervisión negligente y despido injustificado”.
“Se sentía como si fuera un trozo de basura que había que desechar. Se sintió desamparada, su autoestima fue demolida y se cuestionó sus propias habilidades. Si ella quiere una carrera exitosa requeriría de un intercambio de su cuerpo por un ascenso”, señala el documento.
Asta Jonasson llevó su caso a la luz de la Ley de Responsabilidad por Abusos Sexuales y Encubrimiento de California, en vigor desde enero. Según información de EFE, esta disposición concede “un lapso de tres años para que las personas víctimas de agresiones sexuales interpongan demandas contra aquellos que las agredieron y quienes encubrieron dichos actos, incluso si el delito ha sobrepasado su periodo de prescripción”.