El presidente del Congreso, Alejandro Soto, negó que se haya beneficiado con la Ley 31751 durante un juicio en Cusco por el presunto delito de estafa. Afirmó que su caso ya había sido “cerrado desde el 2019″ y que no cometió ningún delito.
“Acaso vamos a desconocer lo que dice la Corte Superior de Justicia, vamos a desconocer un certificado de antecedentes que no tengo ningún proceso o investigación (...) El caso ya lo tenía cerrado desde el 2019, el juez ya lo dijo, yo no tengo que acogerme a una norma que no me beneficia”, alegó Soto en Canal N.
Consultado sobre su voto y el por qué su abogado se amparó en la mencionada ley, que modificó el código procesal penal y cambió los plazos de la suspensión de la prescripción de los delitos, Soto respondió lo siguiente:
“Lo que dice mi abogado es en el ejercicio de defensa, está utilizando una norma que no me beneficia, mi caso ya estaba prescrito... Al yo tener hace años una prescripción, no tenía impedimento para votar a favor o en contra (de la ley 31751″)”, precisó.
El titular del Parlamento agregó que ha presentado un certificado que acredita que es una persona “limpia”. “Yo quisiera que también vean el caso de mi contrincante para ver cuántas denuncias tiene. No tengo nada, absolutamente, esto se cae de por sí solo y los perdedores están en una campaña de desprestigio”, cuestionó.
Soto finalizó diciendo que acudirá a Ética ni bien se conforme el grupo de trabajo, además, lamentó haber dicho que tuvo una relación fugaz con la señora Lizeth Peralta, madre de un niño de 11 meses de edad.