Keiko Fujimori al salir de la sala de audiencia. Foto: Alessandro Currarino / @photo.gec
Keiko Fujimori al salir de la sala de audiencia. Foto: Alessandro Currarino / @photo.gec

El Tercer Juzgado Penal Colegiado Nacional instaló ayer el juicio oral del caso “Cócteles”, al rechazar los recursos de nulidad y de reposición interpuestos por varios de los procesados para evitar su juzgamiento en el proceso por los aportes de dinero no declarados que recibió en las campañas electorales de su lideresa, Keiko , en 2011 y 2016.

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La sala declaró improcedentes a tales articulaciones dilatorias y determinó que hoy, desde las 9 a.m., continuará en juicio de audiencia única con su segunda sesión.

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Keiko Fujimori afronta un pedido fiscal de 30 años y 10 meses de prisión por los delitos de lavado de activos, organización criminal, obstrucción a la justicia y falsa declaración en procedimiento administrativo. Los restantes 47 coprocesados enfrentan cargos por al menos uno de los referidos ilícitos.


Fiscal bien protegido

A fin de evitar ser asesinado, como ha sucedido con magistrados en juicios contra la camorra italiana o la mafia neoyorquina, el fiscal a cargo del caso, José Domingo Pérez, acudió al juzgamiento con chaleco antibalas y protección policial.

“Debo resguardarme. Se ha recibido una amenaza y la PNP deberá realizar las investigaciones correspondientes”, señaló el fiscal que defendió su investigación y la acusación que Fujimori y sus coprocesados atacaron para evitar, sin éxito, que se les juzgue.

El último 28 de junio, un sujeto le gritó al chofer de “tu jefe va a caer, ese terruco de m...”, consta en una denuncia. Además, fujimoristas ayer también lo insultaron frente a la sede judicial.


Ataque fujimorista

“Próxima a inaugurarse la temporada circense de julio en Lima, aparece el ‘especial’ de Domingo Pérez, quien ostenta un chaleco antibalas. ¿Qué lo atemoriza o por qué carga con una conciencia sucia? ¿Acaso es el karma de Alan García que lo tiene desquiciado? ¡Su teatralidad es más que evidente!”, tuiteó agresivo el legislador fujimorista Alejandro Aguinaga.

Aguinaga, del entorno del indultado Alberto Fujimori, goza de cercanía con el clan que dirige Fuerza Popular.


Juran que trabajan

Al señalar sus generales de ley, la lideresa fujimorista recalcó: “Mi nombre es Keiko Fujimori Higuchi. Divorciada. Soy presidenta del partido de Fuerza Popular y gano 14,000 soles mensuales”. Es decir, “trabaja” como presidenta de su partido.

Quien llamó más la atención fue su exesposo estadounidense Mark Vito Villanella, quien a sus 47 años llegó con su novia 20 años menor, Sofía Chirinos, a quien abrazó y besó antes de entrar a la sala de audiencias, al mostrarse feliz divorciado y ya no bajo el mismo techo que su ex Keiko Fujimori.


Mark se presenta

La Fiscalía pide condenarlo a 22 años y 8 meses de prisión.

“Trabajo como influencer y publicista en redes sociales, en eventos y a veces en programas de televisión, con ingresos alrededor de 14 mil soles, y no tengo antecedentes”, indicó Villanella al presentarse ante la sala integrada por los jueces Juana Caballero, Nayko Coronado y Max Vengo. A la prensa dijo que cobra 3 mil soles por presentaciones.


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