Nuevas revelaciones del caso “cofre” se conocieron ayer en la Comisión de Fiscalización del Congreso, que investiga el presunto uso del vehículo designado a la presidenta Dina Boluarte para trasladar al prófugo Vladimir Cerrón.
En la sesión de este grupo de trabajo se presentó Gabriel Herrera, representante de la junta de propietarios del condominio Mikonos, en Asia, donde supuestamente la mandataria pasó una noche sin su resguardo policial.
Además de negar la presencia de Boluarte, detalló que dos vehículos con placas oficiales del Estado entraron al establecimiento el 16 y 18 de febrero; sin embargo, los números no existían en la Sunarp. “Es decir, eran (placas) fraudulentas”, señaló.
“La presidenta dice haber ingresado a Mikonos (pero) lamentablemente, yo debo decir que no tenemos información al respecto que así lo certifique. Si es que ella ingresó, debe haber ingresado oculta en la maletera de un vehículo”, añadió.
NO VA. Mientras las dudas en torno a este caso crecen, la jefa de Estado ayer no acudió a la sesión de la comisión, a la que fue invitada para que responda sobre este asunto.
Por medio de un oficio, el secretario general del Despacho Presidencial, Enrique Vílchez, anunció al presidente de la comisión, Juan Burgos, la decisión de Boluarte y le pidió remitir el pliego de preguntas correspondientes”.
No obstante, Burgos refirió que le pedirá fecha y hora para asistir a Palacio y recoger el testimonio de Boluarte.
Asimismo, detalló que se citará a otros testigos importantes como la encargada de la seguridad de la mandataria, Milagros Vargas, conocida como “La sombra”.
OJO AL DATO. Herrera dijo que fueron alquiladas dos casas: en una se vio a extranjeros y en otra los inquilinos cambiaban con frecuencia.