Se acerca el verano y esto significa una mayor exposición de nuestra piel al sol. Durante esta estación, la ropa suele estar más descubierta, pues ¿quién no quiere mostrar una piel saludable e hidratada?
Para cuidar el órgano más extenso del cuerpo debemos usar diariamente protección solar, lociones hidratantes, exfoliarla una vez por semana y evitar el consumo de tabaco y alcohol, porque incrementan los radicales libres.
La alimentación también es fundamental.
Recomendaciones:
1. El agua es vital. En meses calurosos, la necesidad de hidratación se incrementa; además del agua e infusiones, consumir alimentos que contengan agua como las frutas y las verduras.
2. El betacaroteno presente en las frutas y verduras de color amarillo y naranja es el precursor de la vitamina A, que es esencial para la renovación de piel y mucosas.
3. Las vitaminas del complejo B y C también son importantes; la vitamina B intervienen en los procesos de renovación celular y la C tiene poder antioxidante y participa en la producción de colágeno.
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