¿Qué le pasa a este ? La ilusión con que millones de peruanos buscaban empezar a renovar la clase política parece que ha sido como gastar pólvora en gallinazos. Tiros al aire. La misma chola con diferente pollera. ¿O ya olvidaron el ¡váyanse todos!?

Todo indica que heredó el desatino del anterior Parlamento y, eso, nos hace pensar que hay un ADN invariable, hereditario, que alimenta la pobreza legislativa.

La crisis sanitaria por el tiene a la población preocupada por su integridad y por sus bolsillos, y solo mira con el rabillo del ojo a los congresistas, la mayoría de ellos unos ilustres desconocidos, pero ¡mucho cuidado con ellos!

Ya suman tres perlitas en medio de la pandemia: el retiro del 25% del fondo AFP, pese a la opinión contraria del Gobierno. El archivamiento del proyecto del Ejecutivo para la Reforma Integral del sistema pensionario, para acabar con tantos abusos.

Y, para finiquitar la semana, aprobó irresponsablemente el proyecto que formaliza el servicio de taxis-colectivos a escala nacional, con excepción de Lima y Callao. Esta, además de ser una norma discriminatoria, abre una ola incontrolable de contagios, ¿o los padres de la Patria no están enterados del desacato que impera en el norte del país a las normas de la cuarentena?

En buena cuenta, con esta decisión del Congreso, le estamos dando una pistola al COVID-19 para que aniquile a los usuarios del transporte. Es la purita verdad. Yo lo que veo aquí es mucho interés creado, legisladores que son jueces y parte y ganas locas de jalar agua para el molino.

Y hay otra cosa realmente lamentable: No pasa nada con la lampa. Está rota. Acción Popular prometía en este renacimiento político, pero algo sintomático es que en las redes sociales están pintado la palana de color naranja. Y esa no es una buena señal.

Esto fue todo por hoy, cierro el ojo crítico, ¡buen fin de semana!