Qué tal.
• Tenemos unos congresistas con tremendos churrascos en los ojos.
• Y un corazón que palpita indiferencia.
• No ven y tampoco sienten el clamor del pueblo en las calles.
• Ni tampoco los gritos de dolor de las víctimas de los perdigones.
• No sé si a esta hora ya eligieron al nuevo presidente, pero el espectáculo ha sido lamentable.
• Les fascina perder el tiempo y no saben el gran daño que le hacen al país.
• Todos quieren pescar a río revuelto. O sea, vivir a costas del país.
• La verdad es que, como corresponsables de la crisis, todos deberían irse a su casa, acompañando a Vizcarra.
• Pero no, ellos se creen sacrosantos y, desde ayer, han estado en una mechadera por chapar el poder.
• El poder, tanto en el Ejecutivo como en el Legislativo.
• Y es que en ambos poderes están las gallinas de los huevos de oro.
• Ahora se habla de dos listas. El consenso no está en el diccionario de los padres de la Patria. • Qué estará pagando el Perú con estos representantes que no representan a nadie.
• “Merino no me representa”, fue el epitafio sobre la tumba política de uno de los grandes culpables de la anarquía predominante.
• Y el Tribunal Constitucional, en voz de su presidenta Marianella Ledesma, ya declaró fundada la demanda competencial.
• O sea, le están dando en buena cuenta la razón a Vizcarra, aunque eso no implica que este vuelva a Palacio.
• Daniel Salaverry ha planteado que la mandamás del TC asuma la presidencia de la República porque “el Congreso no está en la capacidad”.
• No es una mala idea, pero implicaría un mayor movimiento jurídico y el país no puede estar más tiempo acéfalo.
• Guardamos saliva para cuando tengamos todos los elementos en la mano.
• Y los nombres del nuevo presidente de la República y del Congreso, respectivamente.
Esto fue todo por hoy, cierro el ojo crítico, hasta mañana.