La cruda realidad: El que pierde es el pueblo

Las protestas en el país continúan ocasionando estragos. Al cumplirse una semana de las movilizaciones, el bloqueo de carreteras, los ataques a las instalaciones de los aeropuertos y una variedad de actos vandálicos, el único perjudicado es el pueblo. Es lamentable que en plena campaña navideña, la más importante del año para los comerciantes, las pérdidas ya sumen miles de soles debido a las movilizaciones en todo el país. Solo en Mesa Redonda, ya llevan más de 10 millones de dólares en pérdidas. En el Centro de Lima, los comerciantes afirman que sus ventas han caído en un 70% a consecuencia de las protestas y actos vandálicos que alejan a los consumidores. El turismo es otro sector que viene siendo golpeado por la violencia que hay en el país. Protestar está bien, es un derecho; pero dañar la propiedad pública y privada es un delito y como tal debe ser sancionado. Ante este panorama, el Ejecutivo decretó el estado de emergencia a nivel nacional por 30 días. La medida busca devolver el orden interno con la intervención de la PNP y las FF.AA. Que así sea.