El primer Atlas de Impunidad mundial, presentado durante la Conferencia de Seguridad de Múnich ubica a Venezuela en el puesto 11, en gran medida por el régimen autoritario de Nicolás Maduro.

Venezuela -advierte el Atlas- es un país especialmente afectado por la impunidad. Ocupa el puesto 11 en el Atlas, lo que refleja un nivel de impunidad superior al de Haití (15º) y al de Nicaragua (38º), en gran medida como resultado del régimen autoritario de Nicolás Maduro, que ha intensificado la represión incluso mientras adopta un enfoque más pragmático de la economía.

Además, el régimen de Maduro se encuentra entre los cinco países con peores resultados en la dimensión de gobernanza sin rendición de cuentas -sólo por detrás de Corea del Norte y por delante de Myanmar-, “algo que es poco probable que cambie en un futuro próximo”, advierte el Atlas.

Entre ellos se incluye la perspectiva de un enjuiciamiento internacional en respuesta a los abusos del régimen”, agrega.

No hay rendición de cuentas

“La impunidad es el ejercicio del poder sin rendición de cuentas, que se convierte, en su forma más cruda, en la comisión de delitos sin castigo... La impunidad es la idea de que ‘la ley es para tontos’”, afirma en su dura introducción el primer Atlas de Impunidad mundial.

Confeccionado por el Eurasia Group y el Chicago Council on Global Affairs, la investigación es un índice exhaustivo que rastrea el abuso de poder en cinco dimensiones sociales clave: gobernanza sin rendición de cuentas, abuso de los derechos humanos, conflictos, explotación económica y degradación medioambiental.

Afganistán, Siria y Yemen encabezan la lista de este año con la puntuación de impunidad más alta, mientras que Finlandia, Dinamarca y Suecia con las puntuaciones de impunidad más bajas. En la región, el peor situado es Venezuela, que ocupa el puesto número 11 en todo el mundo.